Periodo prehispánico
En Bolivia se han hallado evidencias de ocupación humana desde el 12 000-10 000 a.C. en el yacimiento de Viscachani.15 Hasta el 1200 a.C. se desarrollan unas culturas sedentarias en el altiplano. A partir de esta fecha, las culturas Chiripa y Wankarani son las dos más importantes del periodo formativo.
La cultura de Tiwanaku, cerca del Lago Titicaca, marca un momento de florecimiento cultural de la zona altiplánica. En torno al 1100 a.C. esta cultura desaparece, aunque la causa no está aún definida, investigaciones del historiador Max Uhle reportan que sus territorios fueron invadidos por grandes oleadas militares procedentes del sur (lo que actualmente es Tucumán al norte de Argentina y Coquimbo, al norte de Chile). Dichos invasores serían la etnia conocida como los aymaras.
No se sabe con exactitud que motivó a los aymaras a buscar mejores tierras al norte y desplazar a los Tiwanakus , probablemente fueron cambios climáticos, o quizá la invasión de otros pueblos.
Cualquiera que sea la causa, los aymaras atacaron repentina y contundentemente logrando ganar todo el territorio del Collao para ellos, mientras tanto los Tiwanakus dispersos se vieron obligados a emigrar por el norte. Según evidencias arqueológicas descubiertas por Francis de Castelnau en 1845, y respaldadas por Max Uhle, Tiwanaku fue atacado cuando aún estaba poblado.
Luego de una lucha entre los diferentes grupos que habitan la región (aymaras, urus, collas, lupacas, y pacajes), los aymaras establecen un dominio que abarca partes del sudeste del Perú y oeste de Bolivia.
El dominio del Reino Colla de los aymaras perduró hasta 1438, cuando el inca Pachacútec incorpora el altiplano boliviano al Tahuantinsuyo, los incas decían ser descendientes de los Tiwanakus (la primera etnia inca en Cuzco habría sido una caravana de inmigrantes llegados del reino altiplánico Tiwanaku (motivo por el que la realeza inca hablaba en lenguaje puquina y no en quechua).16
Durante períodos posteriores, los incas intentan sin éxito conquistar el oriente boliviano (en general, no incursionaron mucho en la selva con la que limitaba de su vasto imperio), que estaba habitado por etnias de linajes amazónidos y pámpidos que eran principalmente cazadoras-recolectoras, destacándose los chanés y guaraníes llamados despectivamente «chiriguanos» por los Incas. En el incanato de Huayna Cápac, se levantan fortalezas para detener el avance de los chiriguanos.
En las regiones orientales de Moxos y Baures, entre los siglos IV a. C. y XIII d. C., se desarrolló la Cultura Hidráulica de las Lomas.
Conquista española y periodo colonial
El primer europeo en ingresar al actual territorio de Bolivia fue Alejo García en 1520, quien llegó hasta Mizque al servicio de la corona portuguesa que es cuando se empieza a tener noticias de que seres barbados y vestidos con armaduras merodeaban el Imperio. El primer español que arribó para colonizar estas tierras fue Diego de Almagro, después de partir del Cuzco con el fin de conquistar Chile. Muerto Almagro, Francisco Pizarro envió a su hermano Gonzalo a conquistar y colonizar la región del Collasuyo.
Pedro Anzúrez fundó La Plata (actual Sucre) en 1538, Potosí surgió en 1545, La Paz en 1548, Santa Cruz de la Sierra en 1561 y Cochabamba en 1571.
La colonización española se caracterizó por presentar una base minero-agrícola. La ciudad de Potosí, la más poblada de América en 1574 (120 000 habitantes), se convirtió en un gran centro minero por la explotación de las minas de plata del Cerro Rico de Potosí y en 1611 era la mayor productora de plata del mundo. El rey Carlos I había otorgado a esta ciudad el título de Villa Imperial después de su fundación. La región oriental de Moxos fue anexada al imperio español en el siglo XVI.
Durante algo más de 200 años el territorio de la actual Bolivia constituyó la Real Audiencia de Charcas, uno de los centros más prósperos y densamente poblados de los virreinatos españoles.
Potosí empezó su decadencia en las últimas décadas del siglo XVIII al quedar la minería de la plata en un estado de estancamiento, como consecuencia del agotamiento de las vetas más ricas, de las anticuadas técnicas de extracción y de la desviación del comercio hacia otros países. Con la llegada de la Casa de Borbón a la corona española en 1700, se profundiza la institución de la Encomienda para revertir la caída de la economía minera, imponiéndose mayor rigurosidad al trabajo de la mita y al tributo indígena.
En 1776, la Real Audiencia de Charcas, que hasta entonces formaba parte del Virreinato del Perú, fue incorporada al Virreinato del Río de la Plata.
Independencia y consolidación de la república
Entre 1779 y 1781 se produjeron levantamientos indígenas a la cabeza de Tomás Katari, Túpac Amaru II y Túpac Katari que se oponían al cobro excesivo de tributos, los abusos de la mita y el desconocimiento de otros derechos. Los levantamientos fueron controlados por los españoles, pero antecedieron a las luchas independentistas del Siglo XIX.
Las sublevaciones de las ciudades de Chuquisaca (actual Sucre) y La Paz de 1809 fueron el punto de arranque de las guerras de independencia hispanoamericanas. Desde 1811, a partir de la revolución de mayo acaecida en la ciudad de Buenos Aires en 1810 se sucedieron hasta 1820 tres expediciones auxiliares argentinas incluyendo la de Ignacio Warnes en Santa Cruz de la Sierra, pese a esto y a los esfuerzos de las republiquetas, (siendo la más exitosa en este sentido la Republiqueta de Ayopaya), los realistas disputaron tenazmente el control hasta la muerte de Pedro de Olañeta (nombrado último virrey). El país se declaró independiente el 6 de agosto de 1825 mediante la Asamblea General de Diputados de las Provincias del Alto Perú, con el nombre de República de Bolívar que fue cambiado por República de Bolivia independizándose de Perú.
En 1826 el libertador Simón Bolívar otorgó al país la primera Constitución, que fue aprobada por el Congreso de Chuquisaca. Posteriormente, Antonio José de Sucre, Gran Mariscal de Ayacucho, fue elegido Presidente de la República de Bolivia.
Desde su emancipación, Bolivia se sumergió en un estado crónico de revoluciones y guerras civiles. Los primeros 50 años de la República se caracterizaron por la inestabilidad política y por constantes amenazas externas que ponían en riesgo su independencia, soberanía e integridad territorial. En 1825, el Imperio del Brasil invadió el oriente del país, ocupando la provincia de Chiquitos. En ese entonces, el Mariscal Antonio José de Sucre envió un ultimátum, amenazando con enviar al ejército libertador a expulsar a los invasores. La provincia fue evacuada por los brasileños. Posteriormente, se produjo la invasión de tropas peruanas de 1828, lideradas por Agustín Gamarra y cuyo objetivo principal era forzar la salida de las tropas de la Gran Colombia. El conflicto concluyó con el Tratado de Piquiza y la retirada peruana de suelo boliviano tras lograr la renuncia del presidente Sucre y la instauración de un gobierno sin influencia bolivariana.
Estado Plurinacional
Gobierno y división de poderes
El sistema de Gobierno se define según lo establecido en el Artículo 11 de la Constitución Política de 2009:
Bolivia se constituye en un Estado Unitario Social de Derecho Plurinacional Comunitario, libre, independiente, soberano, democrático, intercultural, descentralizado y con autonomías. Bolivia se funda en la pluralidad y el pluralismo político, económico, jurídico, cultural y lingüístico, dentro del proceso integrador del país.
Constitución Política del Estado (Artículo 1)
Se autodenomina plurinacional en consideración a las cerca de cuarenta etnias indígenas que habitan en su territorio, entre ellas se cuentan a los aymaras, quechuas, guaraníes, afro-bolivianos, como los mas representativos.
La Constitución establece la división de poderes en cuatro órganos de gobierno:
Órgano Ejecutivo
Compuesto por el presidente (Jefe de Estado), el vicepresidente, elegidos por sufragio universal y los ministros de Estado. El período de mandato es de cinco años con una sola reelección.
Órgano Legislativo
La Asamblea Legislativa Plurinacional es presidida por el vicepresidente de Estado. Está compuesta por dos cámaras: la Cámara de Senadores con 36 miembros (cuatro representantes de cada departamento) y la Cámara de Diputados con 130 miembros (la mitad elegida por votación directa y la otra mitad elegida de forma indirecta en la lista encabezada por el candidato a presidente). Su facultad es la de aprobar y sancionar leyes. La Constitución prevé diputaciones especiales para los pueblos indígenas.
Órgano Judicial
Formado por el Tribunal Supremo de Justicia (máxima instancia de jurisdicción ordinaria), Tribunales, Juzgados y el Consejo de la Magistratura. La justicia es impartida en dos tipos de jurisdicciones: ordinaria e indígena originaria campesina. La justicia constitucional se ejerce por el Tribunal Constitucional.
Órgano Electoral
Compuesto por el Tribunal Supremo Electoral (máxima instancia formada por siete miembros elegidos por la Asamblea Legislativa Plurinacional), Tribunales Departamentales, Juzgados Electorales, Juzgados de Mesa y Notarios Electorales.